Ella provoca
casi sin querer.
Palabra color carmín
y en el bolso, provisiones.
No necesita enseñar escote
ni pierna.
Muerde su mirada.
Pide cerveza,
pero ella no apoya.
Se la juega a piedra,
papel o tijera.
Otra cerveza
(luego pasa al gin-tonic).
También juega a ser
evidente sin serlo,
a la psicología inversa,
y a las constelaciones
(im)previsibles.
No esperará hasta el
último trago para mostrar(se).
Jugará al despiste,
pero eso ya lo sabías.
Casi queriendo,
como quien no quiere la cosa.
*Inspirado en el escritor @Defreds
*Imagen: Rafael Salazar