miércoles, 29 de julio de 2015

Years & years



No supe entender tu plano arquitectónico.
Ese en el que te inclinabas más por mesas y peceras 
que por casas de ángulo recto con jardín.

Es ahora cuando comprendo que eres equilátero, 
que tu triángulo es la suma de tres lados iguales, 
que tú bien sabes elegir el tono exacto en el momento preciso.

No supe ver las ondas sinuosas de las medusas que 
un día pintaste en tu habitación. Tampoco sabía cómo interpretar 
la manzana con pan un sábado cualquiera en Las Canteras. 

Es ahora cuando conozco esa forma que tienes de perderte 
en Míconos, Brighton, Londres o Madrid. Es ahora cuando
aprecio tu lado singular y creativo. 

No supe excavar ni romper los muros de hormigón, 
como tampoco supe fijarme en la minuciosidad de 
las paredes de esos castillos de arena.

Es ahora cuando descubro que estaba en lo cierto, 
que aquello que un día diseñaste, brilla hoy con luz propia
y con una armonía perfectamente imperfecta.  



*A mi hermano

lunes, 13 de julio de 2015

Las cigüeñas no vienen de París



No a lo previsible, a lo típico, 
a lo vulgar, a lo banal, 
al racismo, al estereotipo, 
a la ciudad de moda, a eso que llaman festival.

No a la informalidad, a lo fácil, 
a solo apreciar lo comercial, a solo pensar en el qué dirán, 
a la matanza de elefantes por marfil, 
a los amores que vienen y van.

No a las esperas eternas, a los cuentos baratos, 
al final predecible, al refresco sin gas, 
al olor a tabaco, al beso no robado, 
al tonteo sin picardía, a buscar una excusa más.

No a la mentira, a la hipocresía, 
al lavado de cerebro, a perder viejas costumbres, 
a la mente cerrada, al exceso de tecnología, 
a la mirada vacía, a las generalizaciones.

No al miedo a lo desconocido, a comer solo, 
a no dejarse llevar, a lo establecido, 
a los candados en puentes, a no romper con todo, 
a no donar, al reglón torcido.

No a la no organización, a las cañas sin amigos, 
al cine sin palomitas, a la noche planificada, 
a un cumpleaños sin velas, al párrafo no justificado, 
al viaje sin postal, a una vida sin querer exprimirla.